Cambios e intercambios

¿Qué pensar si a ti te cambian por algo pero jamás cambian ese algo por ti?, cuando no importa que a tú te quedes ahí mirando a la nada y tengas que agacharte en medio de la 5 avenida, donde todo el mundo camina corriendo y pisa los múltiples trozos de tu corazón que están esparcidos por toda la acera y mitad de la carretera, con tu ya (des)gastada bolsita de terciopelo para recoger a tu corazón una vez más hecho trizas sin motivo aparente para después ir a la tienda de la esquina a comprar un pegamento para poder recomponerlo en casa, con el pijama puesto, oyendo la televisión y comiendo chocolate para ahogar sus llantos. No es justo que siempre te cambién a ti por otra cosa y de vez en cuando no te antepongan a ella.